martes, febrero 27, 2018

Angelina Gatell

Angelina Gatell (1926-2017) tenía cinco años cuando se proclamó la República. En las entrevistas en las que recuerda ese momento dice que recuerda ir por las Ramblas a hombros de su padre, que recordaba los olores y las banderas de aquella jornada. También decía que la Guerra civil no habría terminado hasta que no quedase ni un muerto sin rescatar de las cunetas de España. 
Así define en unos versos su relación con “La poesía”:


Entró en mi casa y sigilosamente
se instaló entre mis cosas.
Nadie la vio llegar ni advirtió su presencia.

Ya tan sólo recuerdo una inquietud vivísima
una violencia indescifrable
lastimando un sosiego desde siempre inseguro.

No hubo por mi parte objeción, resistencia,
ni nada que impugnara su aparición fortuita.
Y de este modo,
clandestina, se hizo dueña del aire,
del pan, del agua, de mis ojos,
de mi respiración…

Impune, implacable fue llenando
mi corazón con su desorden.
En tan mínimo espacio puso tristeza y gozo,
fundió la claridad con la tiniebla,
valor y miedo
vertió con gesto sibilino
en una misma copa;
abrió puertas, ventanas, descorrió visillos,
plantó en mi huerto su árbol,
esquivó, solidario, amoroso, rebelde,
y me colmó las manos de dones y vacíos.

Y me dejó viviendo

en soledad, con ella.

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